Uno de los beneficiados fue Esperanza Kilme, que recibió una batidora amasadora, una multiprocesadora, un termotanque eléctrico y una puerta reforzada para exterior.
Productores artesanales de cerveza de Quilmes emprendieron una campaña solidaria para ayudar a comedores del distrito a través de cursos en los que transmiten sus conocimientos y mediante la realización de sorteos, donde puede participar cualquier persona de la comunidad.
Se trata de Surveceros, donde también forman parte algunos propietarios de locales gastronómicos de la zona, los cuales ya son una referencia de solidaridad no sólo en el distrito, sino que también de otros partidos del Sur del Gran Buenos Aires. Y el Comedor Esperanza Kilme de la Ribera es testigo de su vocación y capacidad humanitaria.
En diálogo con El Quilmeño, Sebastián Nunell, integrante de la agrupación, consideró que las campañas a favor de los que más lo necesitan representa “el verdadero espíritu cervecero que es muy diferente a lo que todos creen, ya que lo asocian con los excesos. El verdadero espíritu se basa en la solidaridad, en el compartir con el otro”.
“Ayudamos ya sea con materiales, herramientas, electrodomésticos y, obviamente, con alimentos. Para poder comprarlos o conseguir la comida, realizamos cursos donde explicamos algunas técnicas, como por ejemplo un procedimiento con piedras incandescentes como hacían los vikingos, y sorteos de botellas de cerveza o gorras”, describió.
En el mismo sentido, comentó que “nos llena de satisfacción ayudar a las entidades y personas que lo necesitan. Gracias a los sorteos y cursos, a Esperanza Kilme pudimos comprarle una batidora amasadora, una multiprocesadora, un termotanque eléctrico, una puerta reforzada para exterior, 50 metros de cerámicas para piso adhesivo y pastina, más repuestos para baños». «También ayudamos con alimentos. Una vez hicimos un curso en la Universidad Nacional de Quilmes y la entrada eran dos bolsones de comida”, recordó.
Finalmente, destacó el papel de Carmen y Alejandra Piaggio, referentes de la institución que ayudaron, al mencionar que son “dos increíbles mujeres que están a cargo de la entidad que se ocupa de darle de comer a muchísimos pibes todos los días y a la vez tienen talleres de oficio”.