No solo individualmente rescataron perros y gatos, sino también pollitos, gallinas, palomas y murciélagos. Piden a la comunidad que dejen de financiar y promover prácticas que generen violencia hacia ellos.
Vecinos de Quilmes y Florencio Varela crearon un grupo denominado Antiespecistas Zona Sur con el objetivo de reunir a personas veganas a lo largo de la región que están dispuestas a difundir un mensaje de respeto y consideración moral hacia todos los animales a través de diferentes actos: la promoción en el rescate de especies, las charlas, las mesas informativas en la vía pública o en peatonales, y divulgación de libros, documentales, pegatinas de afiches, entre otras cuestiones.
La coordinadora de la agrupación, Naomy Valussi, mencionó que son cada vez más aquellos que «se sumen a respetar a todos los animales como seres sintientes que son, y que piden que se dejen de financiar y promover prácticas que generen violencia hacia ellos».
Una de esas maneras de brindar asistencia resulta ser la salvación de los mismos por parte de los integrantes del citado movimiento. A propósito comentó que «la mayoría de nosotros realizamos rescates siempre que se dieron, difundimos pedidos de auxilio, colaboramos con santuarios y refugios, hacemos todo lo que esté a nuestro alcance para ayudarlos. Lo procedemos generalmente con perros y gatos, que encontramos lamentablemente en condiciones deplorables».
«Posteriormente, se los rehabilita, se los castra y se los dan en adopción. Pero, también, muchas de las personas que formamos parte del grupo tuvimos la oportunidad de rescatar pollitos de la industria cárnica, gallinas, palomas, murciélagos, entre otros», añadió.
En relación a los últimos dos especímenes señaló que «son violentados terminando muy mal porque a la gente les parecen «sucios» o que transmiten enfermedades, pero la verdad es que esto mismo pasa porque ellos se ven atraídos por la basura y la contaminación que los humanos generan».
Con respecto a las respuestas que reciben por parte de los vecinos, Valussi puntualizó que fueron «muy buenas hasta ahora, obviamente hay gente que se lo toma un poco a mal a las cosas, a veces enterarse de que con nuestros hábitos y costumbres podemos estar generando sufrimiento a muchísimos animales, genera cierta culpa y resistencia. Hacemos lo posible por presentar información».