Los empleados accedieron a la ayuda salarial del gobierno, pero los dueños no pueden pagar el resto de las remuneraciones, a raíz de la falta de ingresos.
Trabajadores y dueños de albergues transitorios de la región manifestaron su preocupación ante «el inminente quiebre» de la industria, debido a que permanecen cerrados desde que comenzó el Aislamiento, Social, Preventivo y Obligatorio declarado ante la pandemia de coronavirus.
Además, mencionaron que los hoteles alojamiento cuentan con medidas de distanciamiento y sanitización «desde antes de la pandemia», y que «no son un lugar de encuentro social ya que no ingresan más de dos personas a las habitaciones, ni entran en contacto con los empleados de recepción, ni con los de limpieza».
Es así que el martes, trabajadores encabezaron una manifestación frente a sus lugares de trabajo para dar a conocer la situación desesperante por la que atraviesan. De hecho, afiliados a la Unión de Trabajadores Hoteleros y Gastronómicos de la República Argentina (UTHGRA) llevaron pancartas a albergues de la zona como Susurros de Florencio Varela; Eros y El Ruca de Quilmes y Amok de Berazategui.
En diálogo con este medio, el presidente de la Federación Argentina de Hoteles Alojamientos, José Manuel Capelo, describió que la situación del rubro «es desesperante, ya que los hoteles están a borde de la quiebra, y por ende, estamos cerca de la pérdida total de las fuentes laborales».
Con respecto a la situación del personal, detalló que si bien recibieron el pago del programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y a la Producción (ATP), «no nos podemos hacer cargo de la otra mitad de los sueldos porque estamos sin facturar desde hace 7 meses».
En este sentido, puntualizó que «estamos muy preocupados por nuestros trabajadores, cuyo 80 por ciento son mujeres, que son jefas de familia. Es su único ingreso. Si se quedan sin trabajo ahora, tampoco se van a reinsertar rápido en el mercado porque estamos inmersos en una grave crisis económica».
«Ni siquiera tenemos dinero para pedir préstamos, y de hecho, algunos hoteles alojamiento dejaron de pagar las tasas municipales, y para colmo, nos siguen llegando las facturas de los servicios y tampoco pueden abonarla», aseveró.